domingo, 9 de octubre de 2016

¡SALVE REGINA! ¡MATER MISERICORDIA!

La percepción es una trampa, una trampa hecha de interpretación.
Cuando nacemos la percepción no tiene estructura, no tiene interpretación.
No tenemos el concepto de separación, en realidad no tenemos ningun concepto,
luego distinguimos el afuera, el primer afuera es la madre.
Con el tiempo empezamos a armar una interpretación que le da forma a la percepción.

Codificamos esa interpretación mediante el lenguaje, la sintaxis materna, que a partir
de ahí será la herramienta perceptual que le dará orden a la percepción.
Sintaxis es mucho mas que el lenguaje, es la forma en que se construye el lenguaje.
La sintaxis tiene el mismo ritmo, la misma cadencia que el adn,
Es el soft del codificador, que construirá una imágen conocida de lo que impacta
tu percepción.
Con el tiempo, surge el diálogo interno que nos habla de lo que estamos viendo,
que toma el control de esta interpretación.
Analizar el material producido por el diálogo interno para sostener la interpretación
de lo que estamos percibiendo, puede ser un entretenimiento, como jugar al ludo o
al ajedrez, pero es un encierre en sí mismo.
Los valores que se asignan a la percepción son aprendidos, y en ese aprendizaje y por
ende en los valores se incluyen creencias y nudos emocionales.
En percepción todo lo referente al análisis y discusión de productos sintácticos del
diálogo interno es bullshit.
Lo que se hace es observarlo, en vez de padecerlo se lo usa como trampolín.
Observase a sí mismo es el inicio, porque desplaza la atención a un tercer punto
creando el espacio, atención espacial.
Observarse a sí mismo hace que entiendas de que trata el producto del diálogo
interno, y como es que se arma y a partir de qué.

Cuando desplazaste la atención al observar, el rollo del diálogo interno tiene
el mismo valor que escuchar una radio,

Observarse a sí mismo es el procedimiento para desidentificarse con la mente.

Si no se sale de la identificación con la mente, en percepción no entraste al
territorio, porque tu producto es literatura, tu rollo mental.

¿que interés tiene en percepción la literatura egoica comparada?

Observarse a sí mismo no tiene que ver con juzgarse o alabarse, es
simplemente observación desapegada.

La ciencia de la percepción, tiene un idioma, una forma de comunicar y
registrar conocimiento, propia de la naturaleza de su estudio.

Como debe explicar cosas que están mas allá de la sintaxis, lo hace en forma
de historias, cuentos, post, para que en el desarrollo de tal historia
el observador perciba un sentido, un ritmo, una matriz, que le transmita
una interpretación, un conocimiento, una práctica.

Si uno no tiene desarrollada la atención, está 100% captado por el diálogo interno,
eso en percepción es una limitación.
En realidad no hay ninguna diferencia con cualquier loco del manicomio,
solo por tener el dialogo interno sensato y en silencio.
Mientras no podamos atestiguar el rollo, todos somos locos que comparten
una locura común que por ser tan común le dicen cordura.

Las ciencia de la percepción no tiene definiciones absolutas.
La sintaxis es solo una herramienta para transmitir hechos perceptuales.
En realidad no importa el idioma, la sintaxis, el formato que se
use para transmitir esos hechos.
Siempre va a ser transistoria y no tiene validez absoluta.

El yo es solo un pensamiento. Es un producto evolutivo de protección.
No se puede dejar de tener un yo. Lo que sí se puede es dejar de adorarlo,
pensando que es lo único que somos, lo que define nuestra totalidad.

Desarticular el yo en general es patológico, no es la meta.
Solo se trata de ponerlo en su lugar dentro del aparato perceptual
y no como único referente.

El guion del yo, por mas que pensemos que es complejo, en realidad
es muy básico, y al observarlo aparece. En general consiste en uno o
dos truquitos que hacemos para llamar la atención, una telaraña para
captar atención. No hay nada malo en ello, lo que no debe hacerse es
identificarse, creerse que somos eso. Y mucho menos pelear para que
el personaje sea creído.

Lograr esto parece simple pero no lo es, porque la fuerza que
nos obliga a percibir es la que lo sostiene.
Sacar esa fuerza, esa fijeza del yo cuesta bastante.
Se usan técnicas, estrategias de conducta, destinadas a poner en evidencia
el personaje. Cuando se lo observa, cuando se lo percibe, ya está,
ya no nos puede engañar, lo hacemos pero no tenemos necesidad de
creerlo, de militarlo.

Eso quita una gran energía involucrada en el proceso perceptual,
que queda libre para usarla con otros fines.

Energía, atención, fuerza vital, como lo que quieran llamar,
en realidad es la fuerza de la conciencia que te obliga a percibir.
Es un comando, sucede.
El truco, por eso es creer sin creer.

La percepción es una trampa, por eso hay que hacerle una trampa
para atravesarla, para desentrañarla.

En percepción se está solo, porque el propio aparato perceptual es la
herramienta. No hay mejores ni peores, porque percibir es un acto
único y personal.
Siempre estas percibiendo, lo conciente que seas de ese proceso, determinará
la capacidad, el poder, con el que puedas manejar dicha percepción.

Avanzar en percepción es eso, adquirir poder para manejarla.

La libertad en percepción no es un anhelo, un ideal, es simplemente
una consecuencia del estado de control de la misma y por lo tanto completamente real,
es un hecho perceptual.

Por extraño que parezca, la desidentificación con el yo te hace mas yo,
al dejar fluir tu yo desde un point of view de conciencia, desde el observador,
el personaje adquiere una potencia mayor, con mucho mas presencia,
con mayor impacto en la percepción colectiva y en la percepción de sí
mismo frente al universo, lo que se traduce en paz interior, en bienestar de vivir.


Una herramienta filosófica para interpretar la realidad para ser válida en la Ciencia
de la Percepción tiene que basarse en hechos perceptuales, hechos energéticos que
sucedan.
No importa si es yoga, taoismo, budismo, biblia, mexico antiguo, zen, coran, iching,
tarot, evangélico, católico, musulman, hinduista, macumba, chikun, cumbia villera
o aliens.

Si describe un hecho perceptual y tiene una herramienta para reproducirlo, sirve.

Todo conocimiento tienes dos aspectos, uno que expande y otro que contrae.

El que contrae te fija, por eso se sostiene creyendo en él. Es el camino de la
religión. Es un propósito social.

El que expande te libera, mediante el diseño conductual que te propone te permite
trascender el yo usando un guión ajeno, que además es abstracto, es decir, modela
tu percepción hacia un efecto determinado. No tienes que creer en él, incluso puedes
pensar que es una shit insoportable, mientras lo practiques tendrás sus efectos.
Es el camino de la práctica, es el camino de la ciencia.

El único efecto que se busca, el que todos producen si se practica
es la desidentificación de la mente, de forma saludable conservando la energía.

Los métodos sanos son los mejores, pero se requiere darle duración,
esto es tiempo y paciencia. Y hay que tener disciplina.

Por eso algunos usan métodos mas riesgosos.

Las plantas alúcinógenas, como los hongos, el peyote, la ayahuasca,
son un método rápido para atestiguar la percepción desapegado del yo.
Pero son métodos riesgosos. Para empezar se requiere un estado psíquico
saludable y potente, para poder mantener el propósito de atestiguar los
procesos y mecanismos de la percepción, sin caer en las visiones y procesos
emocionales místicos que en estos estados, al caer las barreras, son sumamente
potentes e inclusivos. La mayoría termina de rodillas babeando y hablando con
dios o con un enanito verde.
Otro riesgo es que las plantas consumen energía, trayendo problemas de salud,
en el hígado, en el sistema circulatorio, etc. Se puede sostener pero hay que ser
sano, saludable, porque si estás débil fisicamente o con problemas emocionales,
la energía de la planta te va a poner en un proceso de limpieza que provocará
vómitos, llantos, miedos. Es así que curan en las ceremonias de medicina, pero
las personas son concientes de que van a eso, y además son guiadas gentilmente
por un chamán y por el entorno que comparte la ceremonia, en un espacio adecuado,
tranquilo y confortable y seguro.

Igual, no son necesarios ni recomendables tales métodos, porque la evolución
de prácticas y procedimientos actuales, ponen a nuestra disposición técnicas
simples, fáciles, rápidas y eficaces para hacerlo, sin perder la SOBRIEDAD,
que es un requisito fundamental y excluyente para explorar la percepción
con resultados prácticos que aporten algún conocimiento.

Actualmente estamos en una época abstracta, donde se han desnudado los hechos
perceptuales, sacandoles todo vestigio de creencias y conductas extrañas.

La mayorías de los decorados que les ponen a las técnicas en percepción son
destinados a engañar a la mente dándole un argumento, un propósito razonable
que la tranquilice. Lo interesante del caso es que justamente el producto que
va a lograr esta tranquilidad de la mente es una idea irracional, una creencia.

La mente actual, tal como la usa la gente, está mucho mas evolucionada que
eso, ya no necesitamos cuentitos, podemos verlo y hacerlo.

No necesitamos mas que nos engañen, en todo caso, podemos engañarnos
a nosotros mismos, porque igual sabemos que nos estamos engañando.

Eso es CONCIENCIA

Los sacerdotes de la ciencia son unos bichos tan delicados y peligrosos
como lo fueron sus predecesores los sacerdotes de la inquisición católica
o protestante, como también lo son la masa de fieles que los siguen.

Por eso es que hay que ser muy cuidadosos al introducir conceptos y palabras
porque algunas de ellas son poco menos que el demonio o satanás y fácilmente
podés caer en la hoguera.

Sobre todo cuando se hablan de temas que no entienden, como lo es lo que llaman
el inconsciente.

Su grado de ingenuidad e infantilismo con respecto a este tema es increíble,
y es ampliamente superado por cualquier bruja que tire el cuerito o lea la
borra del café.

¡sacrilegio! ¡vete de aquí satanás! ¡comparar el conocimiento científico con una bruja!

El conocimiento científico del inconsciente ni siquiera puede ser llamado así,
es apenas una aproximación a un espacio desconocido que no llega ni al
grado de superstición.

Mientras la ciencia actual se sobreponía de la quema en la hoguera por sacrilegios
tales como dudar de la transustanciación real de la hostia en el cuerpo de cristo
durante la misa, y empezaba a calentarse los pies en el tibio fogón de la evolución
de las especies de Darwin, civilizaciones enteras como las del mexico antiguo, la
egipcia, los tibetanos, los taoístas, los yoguis, las tribus de indios y negros
consideradas prehistóricas, tenían tratados enteros escritos y tradiciones ancestrales
de transmisión oral, sobre el uso y hasta abuso de esa área específica de la percepción
que ellos llaman el inconsciente.

Luego de arrancarse las barbas freud y young y los simpatizantes de ambas pandillas,
logran establecer algunos postulados y leyes con respecto al funcionamiento del
inconsciente y su influencia en la vida diaria.

"el contenido del inconsciente es simbólico" "el inconsciente se expresa en los sueños"
"las pulsiones del inconsciente influencia la vida" "al inconsciente se le habla en símbolos"
"la interpretación de los sueños" y otras pelotudeces básicas, que harían y hacen reír a
cualquier chamán yanomani entre uno de sus viajes de ida y vuelta al inconsciente.

El termino mismo inconsciente es inaplicable al tratar este tema, porque es inconsciente solo
para los tontos que no lo han descubierto y lo miran desde una ventanita imaginaria que
llaman los sueños o alguna pelotudez por el estilo.

Podríamos elegir cualquier herramienta filosófica o sintaxis de cualquier cultura o civilización
de las mencionadas para hablar de este tema. Nosotros vamos a elegir la usada por las culturas
precolombinas de América central y sur por ser las mas abstractas a nuestro entender.

Por eso al inconsciente le vamos a llamar segunda atención en contraposición a la primera atención
que es el mundo que experimentamos en la vida diaria.

Le llamamos atención porque lo que determina nuestra percepción, donde ella está, es nuestra
atención. La atención es más que mirar, es una fuerza que incluye nuestra energía, como la movemos,
como la fijamos, y surge no solo de los cinco sentidos, sino de otras áreas de nuestro ser,
como el corazón, la voluntad, el anhelo, la obsesión.

Como verán, cuando empezamos a hablar de atención y de moverse entre ellas, entrar a tallar
facetas del ser que normalmente no usamos o hasta creemos negativas.

Un ejemplo es la obsesión. El manejo de la obsesión es un tema clave para el control de los sueños,
para viajar a distintos puntos del inconsciente, para fijar la brújula del viaje.

Así como las religiones budistas no tiene mucho que ver con buda,
y el cristianismo tampoco tiene que ver con las enseñanzas de cristo,
que han sido transformadas en sistemas de creencias al servicio del
poder político-militar de turno como formas de manipulación y control social,
las enseñanzas sobre la conciencia en muchos casos han devenido en sistemas absurdos de creencias,
como las brujerías, rituales y hechizos tan comunes en muchos pueblos y culturas.

Esto, que parece un absurdo no lo es tal, sino que es el empleo de
procedimientos y verdades por quienes no las comprenden, resultando
al igual que las religiones en sistemas que funcionan mediante
la creencia en el mal o el demonio, el miedo al castigo y a la muerte.

Este es el caso de los rituales o procedimientos religiosos o mágicos.

Vamos a establecer un criterio sintáctico para hablar de la realidad dual,
para diferenciar la atención fija en un u otro aspecto de esta dualidad.

Aprovecharemos la terminología introducida por el antropólogo Carlos Castaneda,
al explicar la filosofía y cosmogonía de las culturas del antiguo México,
y mas concretamente a la explicación de la realidad dual.

Llamemos primera atención a la normal de la vida diaria, el mundo tal
como lo vemos o concebimos, todo lo que podemos definir y nombrar incluso imaginado.

Llamemos segunda atención al lado oculto de la realidad, el no-ser, esa
vasta zona que está mas allá de lo concebible como real, pero que sin
embargo lo sostiene, cuyo indicio está dado por lo que la psicología ha dado
en llamar el inconsciente, una vasta zona en la que al igual que lo hacemos
con la realidad de la primera atención, podríamos adentrarnos con solo
llevar nuestra atención allí y fijarla.

Lo que desde el punto de vista físico parece un imposible, es decir, entrar
en el inconsciente físicamente, con cuerpo y todo, resulta fácil usando
una puerta que todos poseemos: los sueños.
La interpretación de la psicología con respecto a los sueños se basa en
aspectos reales de estos, pero que al no ser comprendidos en su totalidad
resultan incompletos, hasta infantiles desde el punto de vista de alguien
que ha dominado o está avanzado en este conocimiento.

El infantilismo de la ciencia, que aún no se a puesto de acuerdo en simples
preguntas tales como ¿que es la psique?, resulta en su ignorancia completa
acerca de la segunda atención. Para éstos la única parte válida del ser
humano, la que consideran su vida, es la vida de despierto, relegando todo
el resto de su vida perceptual al término de inconsciente, que si bien le dan
relevancia en términos de descanso, no es propiamente parte de su vida.

Se quedarían boquiabiertos con la práctica de algunas civilizaciones, que
lograban mantener la atención de despierto, la conciencia, tanto despiertos
como dormidos, siendo quizás más relevantes, activos y con propósitos mas
elevados, en su vida en sueños.

¡Uy! ¡cuidado! ¡el demonio de la locura acecha! ¡no escuchen! ¡no escuchen!

Hablábamos de los rituales, y decimos que estos fueron diseñados como
procedimientos para saltearse la fijeza de la primera atención de las personas,
para poder llevarla mas allá, al terreno de la segunda atención.
Todos los rituales son un absurdo en sí mismos, pero eso es lo que los hace efectivos.

Cuando un macumbero entra en trance, o un evangélico cae al piso hablando en lenguas,
es exactamente eso lo que pasa: mediante el ritual engañan su atención de despierto
que cree estar haciendo algo con sentido, algo que en realidad solo tiene por
objeto distraer su primera atención fijándola en el ritual, para así poder desplazar
su atención a la segunda atención.

Es difícil de describir y parece confuso, pero en la práctica es fácilisimo y solo
se necesita de la predisposición de la persona. Lo mismo pasa con el hipnotismo,
las famosas regresiones a vidas pasadas y todas esa parafernalia de extrañas creencias.

¿son reales los sitios a los cuales desplazan la atención, por ejemplo, un macumbero
que incorpora un santo, un evangélico que recibe el espíritu santo y habla en lenguas
extrañas que no comprende, o el que recuerda vidas pasadas con una claridad inusitada?

¿Es real tu vida?

El mundo es una ilusión de dualidad y es tan real como tu quieras, o tanto como puedas.
Lo que sucede en los casos mencionados, que incluso confunde a los propios experimentadores
de tales realidades, es su falta de conciencia y atención, necesaria para mantener la
lucidez en tales estados.

Cuando se habla de un aparato perceptor limpio, sin condicionamientos emocionales reactivos,
sin sistemas de creencias para defender, saludable, sin estar afectado por drogas y sustancias
de ningún tipo, se habla de una condición necesaria para poder mantener la individualidad de
la propia conciencia sin ser afectado. No es un consejo moral o deseable, es la única manera
saludable. Y cuando hablamos de saludable, no es un chiste, es quizás la única manera de
mantener la cordura sin caer en patologías psicóticas o maníacas, en desviaciones místico-religiosas
e incluso en la mas estúpida imbecilidad, cuando se tiene la osadía de desafiar lo límites
de la primera atención para entrar a la segunda.

La realidad, la fijeza en la primera atención, tiene como función principal protegernos,
a modo de atmósfera o escudo, de los avances de lo desconocido, donde todo, absolutamente todo existe
y puede ser, desde los paraísos mas celestiales, hasta los infiernos mas terroríficos.
¿de donde crees que la raza humana a sacado tales mitos?
Hubieron tiempos en que la diversión de hombres poderosos viajeros de la conciencia,
consistía en alinear tales mundos y universos, volviendo con las tremendas anécdotas
e historias de sus viajes.

El propio Apocalipsis de la biblia es uno de ese viajes, hecho quizás de casualidad o por
causa de su epilepsia por el loco del apóstol Juan,
y no es tan difícil alinear esos mundos. Lo indios del amazonas le llaman la tierra de los
lagartos y sus viajes son idénticos a los descritos por Juan. Es increíble y cómico pensar
toda la basura religiosa que han sacado del famoso Apocalipsis, y está ahí nomas, con que
muevas un poquito tu percepción hacia abajo, al llamado sitio de la bestia. ¡uy! ¿que digo?
¿estoy loco? No ves que hay inocentes.
¿querés ir? Hay muchos que estuvieron ahí después de un pegue de floripondio y terminaron
pidiendo socorro a sus mamás.
¿Alucinaciones? ¿No sabés que la realidad es solo una alucinación colectiva?
¿No te lo dijo la física o todavía seguís tranquilo porque son solo avances teóricos sin
modelos matemáticos ciertos y empíricos que los sustenten?

Cuando los sicólogos analizan el contenido del inconsciente y encuentran ahí relaciones con
los traumas del paciente, en realidad eso es apenas el inicio. Eso está ahí en una persona
que no sabe nada de percepción ni se ha interesado en el tema.
Cuando tu casa está sucia, agarras una escoba y barres. No le asignas un mérito especial,
ni te pones a considerar lo limpio que eres, ni mucho menos te pones a analizar la basura:
esto es un arroz, esto es un moco, esto es un pendejo, esto es tierra de mi ombligo.¿o sí?
Limpiar el aparato perceptor, barrer la basura, es apenas el inicio, y no se precisa necesariamente
alguien que lo haga por ti. Es una tarea simple, basta con observarse a sí mismo, y ver
cuando se retuerce el cuerpo y con que, mirarlo, hacerse consciente de ello, y soltarlo.
Quedarse pegado a la mierda sicológica durante años como hacen algunos terapeutas es enfermizo,
una debilidad o patología en sí misma.

¿nunca te paraste en la puerta de la facultad de sicología a ver salir a los estudiantes?
¿No parecen todos gente necesitada de una terapia, mas que futuros sanadores de la mente?

Así como en la primera atención se pueden crear organizaciones imaginarias con solo la atención
de un número adecuado de personas, como los sistemas económicos y otros,
en la segunda atención es fácil crear organizaciones o estructuras compuestas de ATENCIÓN, realizadas
por personas poderosas y fuertes o por un grupo de estas personas.
Estas formas de organizaciones en la segunda atención son realmente fáciles de establecer y
con el tiempo devienen en fijezas muy fuertes, como es el caso de la macumba (candomblé, santería, vudú, etc)
y otros ritos tradicionales de las poblaciones nativas de culturas y creencias diferentes a la occidental.

Una persona, con facilidad para el trance, con predisposición y en acuerdo, mediante la simple
realización de un ritual preestablecido, puede fijar su atención en elementos de estas organizaciones,
como puede ser una "deidad" de esta organización atencional, como lo es el panteón de dioses de las religiones afro.
Su segunda atención, si bien no puede ni sabe usarla de forma consciente,
al exponerse al ritual que es un procedimiento concreto
y complejo, especialmente desarrollado para ese propósito, adopta la forma que encuentra asociada al ritual.
Su atención se desplaza de la realidad cotidiana para fijarse en un arquetipo, un molde
establecido en la segunda atención, un molde hecho de inconciente. Que adopte un molde
no quiere decir que no sea él mismo, su propia energía y su propia psiquis.

Lo mismo pasa con un evangélico, o una persona que asocia memorias ancestrales de las que no es consciente
y le otorga la interpretación de una vida pasada, etc.

Estos "viajes" al inconsciente no son verdaderos viajes, son los llamados trances, sin conciencia.
Acostumbrar la percepción a estos viajes es una trampa peor que la simple racionalidad,
una trampa mucho mas difícil de romper, una fijeza que puede considerarse una especie de locura.

Hay una regla básica: no hay CONCIENCIA sin conciencia.

Es importante decir que una persona fuerte y con conocimiento de una organización de la segunda
atención, no la padece ni sucumbe ante ella. Sus recursos síquicos y su entereza le permiten usarla,
manejarla a su antojo. Esto va mas allá de la creencia, ¿Vos te crees que la Reserva Federal cree
en el dinero? ¿Que los banqueros creen en una economía justa y honesta basada en el bien común?
Sin embargo lo manejan muy bien. Incluso convencen de su convencimiento.

Sostener la propia percepción y fijarla en la segunda atención, en el inconsciente, siendo consciente,
siendo completamente uno mismo, es un acto de poder y cordura que no está al alcance de cualquiera.

Pararse sobre sus propios pies, ser uno mismo, es incluso raro y difícil en este mundo,

¿como no lo sería en el espacio infinito de la percepción?

Incluso para concebir tal cosa se precisa de mucha, pero mucha salud física y mental,
además de coraje, audacia, valor, integridad, huevos y ovarios.

Esto quizás haga la diferencia entre la cordura y la locura de un individuo.

Y ahora chicos a rezar y alabar a los dioses:

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